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La Biblia contiene numerosas promesas que Dios hizo a la humanidad. Estas promesas son declaraciones divinas de lo que Dios ha prometido hacer por aquellos que creen en Él. A lo largo de la historia bíblica, podemos encontrar ejemplos claros que revelan el carácter fiel y cumplidor de Dios en sus promesas.
Ejemplo 1: Promesa de la salvación
La promesa de la salvación se encuentra en Juan 3:16 (NVI): «Porque tanto amó Dios al mundo que dio a su Hijo unigénito, para que todo el que cree en él no se pierda, sino que tenga vida eterna.» Esta promesa muestra el amor inmenso de Dios y su deseo de ofrecer la vida eterna a aquellos que ponen su fe en Jesús.
Ejemplo 2: Promesa de provisión
En Filipenses 4:19 (NVI) se encuentra la promesa de provisión: «Mi Dios les proveerá de todo lo que necesiten, conforme a las gloriosas riquezas que tiene en Cristo Jesús». Esta promesa nos asegura que Dios nos suplirá con todo lo que necesitemos, confiando en su provisión y cuidado constante.
Ejemplo 3: Promesa de consuelo
La Biblia también nos muestra la promesa de consuelo en 2 Corintios 1:3-4 (NVI): «Alabado sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, Padre misericordioso y Dios de toda consolación, quien nos consuela en todas nuestras tribulaciones para que, con el mismo consuelo que de Dios hemos recibido, también nosotros podamos consolar a todos los que sufren.» Esta promesa nos asegura que Dios está presente en nuestras dificultades y nos consuela para que también podamos consolar a otros en sus momentos de necesidad.
