Según la Biblia católica, un ídolo es cualquier objeto, imagen o idea que se adora o venera en lugar de Dios.
La idolatría es considerada como un pecado grave y está prohibida por los mandamientos de Dios.
Ejemplo 1: Libro del Éxodo
En el Libro del Éxodo, específicamente en el capítulo 20, versículo 4, se encuentra el Segundo Mandamiento: «No te harás escultura ni imagen alguna ni de lo que hay arriba en los cielos, ni de lo que hay abajo en la tierra, ni de lo que hay en las aguas debajo de la tierra. No te postrarás ante ellas ni les darás culto.»
Ejemplo 2: Carta de San Pablo a los Romanos
En la Carta de San Pablo a los Romanos, capítulo 1, versículos 22-23, se menciona la idolatría y cómo los hombres «cambiaron la gloria del Dios incorruptible por imágenes que representan a seres corruptibles, a pájaros, cuadrúpedos y reptiles». Esto demuestra cómo la adoración de imágenes o ídolos es considerada como una falta grave ante Dios.
Ejemplo 3: Libro de los Salmos
En el Libro de los Salmos, en el Salmo 115, versículos 4-8, se hace referencia a los ídolos paganos y su falta de poder y vida: «Los ídolos de ellos son plata y oro, hechura de manos humanas. Tienen boca y no hablan, tienen ojos y no ven, tienen orejas y no oyen, tienen nariz y no huelen. Tienen manos y no palpan, tienen pies y no pueden andar, no emiten sonido alguno con su garganta. Sean semejantes a ellos los que los hacen y cuantos confían en ellos.»