Según la Biblia, ser bienaventurado implica experimentar una bendición o felicidad divina. A lo largo de sus diferentes versiones, encontramos varios pasajes que nos enseñan qué significa ser bienaventurado y cómo podemos alcanzar esta bendición de Dios.
1. Mateo 5:3-12 (Biblia Nueva Versión Internacional)
En el sermón del monte, Jesús pronunció las bienaventuranzas, que son ocho declaraciones de bendición. En este pasaje, Jesús dice: «Bienaventurados los pobres en espíritu, porque de ellos es el reino de los cielos» (Mateo 5:3). Esto nos muestra que ser bienaventurado implica reconocer nuestra necesidad de Dios y depender completamente de Él.
2. Salmos 1:1-3 (Biblia Reina Valera 1960)
El Salmo 1 habla sobre la bendición de aquellos que no siguen el consejo de los malvados, sino que se deleitan en la ley del Señor. En el versículo 1, dice: «Bienaventurado el varón que no anduvo en consejo de malos, ni estuvo en camino de pecadores, ni en silla de escarnecedores se ha sentado» (Salmos 1:1). Ser bienaventurado implica evitar la influencia negativa y buscar la voluntad de Dios en Su Palabra.
3. Santiago 1:12 (Biblia Dios Habla Hoy)
En el libro de Santiago, encontramos una referencia a la bienaventuranza en medio de las pruebas y tentaciones que enfrentamos en la vida. El versículo 12 afirma: «Dichoso el que resiste la tentación porque, al salir aprobado, recibirá la corona de la vida que Dios ha prometido a quienes lo aman» (Santiago 1:12). Ser bienaventurado implica perseverar en la fe y confiar en que Dios nos recompensará.