La encarnación según la Biblia se refiere al acto en el cual Dios se hizo hombre a través de Jesucristo. Es un concepto fundamental en el cristianismo y tiene un significado profundo en la redención y salvación de la humanidad. A lo largo de la Biblia, encontramos diferentes pasajes que nos ayudan a comprender este concepto central.

Pasaje 1: Juan 1:14 (NVI)

«El Verbo se hizo carne y habitó entre nosotros. Y hemos contemplado su gloria, la gloria que corresponde al Hijo unigénito del Padre, lleno de gracia y de verdad.»

Este pasaje del Evangelio de Juan nos muestra claramente que Jesucristo, el Verbo, se hizo carne y vivió entre nosotros como ser humano. Esta encarnación nos permite contemplar la gloria divina y experimentar la gracia y la verdad.

Pasaje 2: Filipenses 2:7-8 (NVI)

«Al contrario, se despojó de su rango y tomó la naturaleza de un esclavo, haciéndose semejante a los seres humanos. Y, al manifestarse como hombre, se humilló a sí mismo y se hizo obediente hasta la muerte, ¡y muerte de cruz!»

En este pasaje de la carta a los Filipenses, se nos muestra cómo Jesús, siendo de naturaleza divina, se hizo semejante a los seres humanos al tomar la forma de un esclavo. Su encarnación implicó humillarse a sí mismo y someterse a la muerte en la cruz, demostrando así su amor y sacrificio por la humanidad.

Pasaje 3: Mateo 1:23 (NVI)

«La virgen concebirá y dará a luz un hijo, y le pondrán por nombre Emanuel, que significa ‘Dios con nosotros’.»

En este pasaje del Evangelio de Mateo, se nos anuncia el cumplimiento de la profecía del Antiguo Testamento sobre la venida del Mesías. El nombre Emanuel, que significa ‘Dios con nosotros’, resalta la encarnación de Dios en la persona de Jesucristo, quien estaría presente entre su pueblo como un testimonio de su amor y cercanía.

 

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