La pregunta sobre la edad de la Tierra según la Biblia es un tema que ha sido debatido durante mucho tiempo. La Biblia, en sus diferentes versiones, no proporciona una respuesta explícita o exacta a esta pregunta. Sin embargo, se pueden encontrar algunos pasajes que podrían dar una idea aproximada de la antigüedad de la Tierra según la perspectiva bíblica.
Génesis 1:1
El primer ejemplo proviene del libro de Génesis 1:1, que es el primer versículo de la Biblia. En este pasaje se lee: «En el principio creó Dios los cielos y la tierra». Aunque no se menciona directamente la edad de la Tierra, este versículo indica que Dios creó la Tierra al principio del tiempo, lo cual sugiere que tiene una antigüedad desde el comienzo de la creación.
Génesis 1:14-19
Otro pasaje relevante se encuentra en Génesis 1:14-19, donde se relata la creación del sol, la luna y las estrellas. En estos versículos se menciona que Dios los creó para «señales y para las estaciones, y para días y años». Aunque no se proporciona un número específico de años, este pasaje indica que la Tierra fue creada con el propósito de medir el tiempo, lo cual implica que tiene cierta antigüedad.
Salmos 90:4
El Salmo 90:4 también puede ser considerado para obtener una perspectiva sobre la antigüedad de la Tierra. Este versículo dice: «Porque mil años delante de tus ojos son como el día de ayer, que pasó, y como una de las vigilias de la noche». Aunque este pasaje no se refiere directamente a la edad de la Tierra, sugiere que el concepto del tiempo para Dios es diferente al de los seres humanos, lo cual podría implicar que la Tierra tiene una antigüedad mucho mayor de la que nosotros podemos comprender.
Apocalipsis 10:6
El último ejemplo se encuentra en Apocalipsis 10:6, donde se menciona: «y juró por el que vive por los siglos de los siglos, quien creó el cielo y las cosas que están en él, y la tierra y las cosas que están en ella, y el mar y las cosas que están en él». Aunque este pasaje no proporciona una cifra exacta de la edad de la Tierra, resalta la idea de que Dios es el creador de la Tierra y todo lo que hay en ella, lo que implica que tiene una antigüedad considerable.